Aula Financiera
Expresiones que delatan que necesitas mejorar tu cultura financiera
“Yo no me entero de las cuentas. Eso lo lleva mi pareja”, “¿Presupuesto? ¡si no llego ni a final de mes!” Si sueles decir alguna de estas frases, ¡peligro!; quizá tendrías que revisar tu cultura financiera
21 de junio de 2016.- Sólo la mitad de los españoles, un 49%, lograba superar un sencillo test sobre cultura financiera básica realizado recientemente por el Global Financial Literacy Survey en 140 países, y elaborado por la agencia de calificación Standar&Poor´s, el Banco Mundial, la consultora Gallup y la George Washinton University. Un porcentaje muy ajustado, igual que la nota que se daban los españoles, un 5,6, en este ámbito, según el estudio sobre "La cultura financiera de la familia española, el ahorro y sus medidas de protección”, del Instituto para la Protección Familiar.
Estos datos ponen de manifiesto que la educación financiera es, para gran parte de los ciudadanos, una asignatura pendiente. ¿Eres uno de ellos? Si te escuchas pronunciando alguna de estas frases, está claro, necesitas adentrarte un poco más en el mundo de las finanzas para mejorar tus conocimientos y la gestión de tu economía.
“Yo no me entero de nada de las cuentas de casa. Todo lo lleva mi pareja”. Seguro que has escuchado más de una vez a alguien diciendo una frase de este tipo. Puede ser habitual que en el reparto de tareas, uno de los miembros de la pareja se haga cargo de gestionar las cuentas, realizar los trámites con el banco o tomar la iniciativa en las finanzas. Sin embargo, las cuestiones económicas afectan a todos los integrantes del hogar y es importante que los dos miembros de la pareja estén informados y puedan debatir cada decisión, conocer las condiciones y las repercusiones de realizar una inversión, suscribir un depósito, un seguro… Además, imagina qué sucedería si en un momento determinado la persona que no está al tanto de la economía ha de tomar las riendas del hogar.
“No sé ni qué condiciones tengo en la hipoteca”. Estar informado en la economía, y especialmente, en las decisiones que inciden en tu bolsillo, es fundamental. Recuerda que nunca has de firmar nada sin tener todos los datos en cuanto a condiciones, intereses, costes, etcétera. Todo ello, tanto en el caso de la hipoteca como de otros productos financieros, repercutirá en tu economía cotidiana y presupuesto, por lo que has de saber cómo te afectan, cómo varían a lo largo del tiempo y tenerlo en cuenta a la hora de organizar tus finanzas.
“Siempre confío en lo que nos aconseja nuestro cuñado”. Por algún extraño motivo, los cuñados son los grandes asesores en economía en muchas familias :). Está claro que los españoles nos fiamos de nuestra familia y amigos cuando tenemos que hacer cuentas; de hecho, el estudio sobre “La cultura financiera de la familia española” señalaba que el 74,4% de los hogares españoles acudían a su entorno a la hora de buscar asesoramiento en temas como la protección económica familiar. Sin embargo, las circunstancias y necesidades no son las mismas en todos los hogares, por lo que una buena solución en un caso, puede resultar pésima en otro. Si necesitas consejo y asesoría busca a un profesional de confianza. ¿Cómo conseguirlo? Aquí tienes algunas claves para encontrar a un asesor financiero que te ayude a planificar tu economía familiar.
“¿Hacer un presupuesto? ¡Bastante tengo con llegar a final de mes!” Precisamente ese es el objetivo del presupuesto, llegar más fácilmente a final de mes. Por ajustados que puedan ser tus ingresos, organizar tu economía siempre te va a ayudar a gestionar mejor los gastos, a poder afrontar algún imprevisto e incluso a ahorrar, aunque sea una pequeña cantidad. Si no reflejamos y confrontamos nuestros ingresos y gastos en un papel, en un cuadro Excel o en el formato que te resulte más sencillo y manejable, te será más complicado identificar aspectos como las partidas en las que quizá puedas realizar algún recorte (reducir alguna salida de ocio, modificar la contratación de algún suministro…), u organizar pagos importantes que llegan a lo largo del año (el seguro del hogar, el pago de algún impuesto…). Es más sencillo de lo que parece y, sobre todo, más eficaz de lo que muchos ciudadanos piensan. ¿No sabes cómo empezar? Te lo contamos en este artículo.
Y tú, ¿conoces alguna otra expresión que te hace pensar en mejorar la educación financiera?
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